Zidane se movía con la prestancia de un torero. Con deslumbrante maestría y elegancia innata, él orquestaba el juego con pasión desbordante. Sus pases eran una obra de arte, como pinceladas magistrales en la gran https://imogenykeb909148.tusblogos.com/38961309/zidane-vs-materazzi-el-choque-más-polémico-del-fútbol